Tumaco, 13 de julio de 2023.
Conocido el Auto 03 del 5 de julio de 2023, en el que se imputa a 15 antiguos integrantes de la extinta FARC-EP (las columnas móviles Mariscal Sucre y Daniel Aldana, y el Frente 29) como máximos responsables en el macrocaso 02, que prioriza la situación territorial de Ricaurte, Tumaco y Barbacoas (Nariño), queremos expresar a la opinión pública lo siguiente:
- Desde la firma del Acuerdo Final, la apuesta de los firmantes de paz ha sido la reparación y la reconciliación. En aras de avanzar en ese proceso, hemos adelantado diversas actividades junto a las víctimas y la comunidad, orientadas a la producción y comercialización de alimentos, la adecuación de caminos en zonas rurales, la exigencia de prestación de servicios públicos en los territorios y condiciones de habitabilidad dignas para todos. Justamente el día de hoy, varios firmantes están realizando una jornada de adecuación de la cancha del barrio nuevo milenio de la ciudad de Tumaco, con el acompañamiento de entidades territoriales y de la ONU. Queremos que las víctimas y la sociedad colombiana tengan la certeza que esta nueva etapa procesal no afectará esa apuesta, ni las actividades en ese sentido.
- Respetamos las decisiones de la Jurisdicción Especial para la Paz, como órgano judicial creado en el Acuerdo Final que debe garantizar la seguridad jurídica de quienes comparecemos ante ella, por lo que es importante aclarar que pese la importancia de este Auto, el mismo no es una sentencia condenatoria, se trata de una primera determinación realizada por la Sala de Reconocimiento, que valoraremos con la asesoría técnica de nuestro equipo de defensa y nos pronunciaremos con mayor detalle en el momento correspondiente, por lo que también exigimos el respeto a todas nuestras garantías procesales y a que no se realicen juicios anticipados.
- Recibimos con preocupación la determinación en relación con el exterminio y persecución de pueblos étnicos, si bien sabemos y hemos reconocido en varios escenarios nuestra participación en hechos victimizantes y que causamos daños a estas comunidades en el marco del conflicto armado del que hicimos parte, también sabemos que las afectaciones que han sufrido no inician con las FARC y que las mismas continúan pese a que nosotros dejamos las armas, por lo que es importante afirmar que nuestro objetivo nunca fue atacar a estas poblaciones en razón a su pertenencia étnica por lo que valoraremos en detalle los argumentos planteados por la JEP para llegar a esta conclusión, tal como con los hechos de violencia sexual, pues no responde a los objetivos y motivaciones que tuvimos como organización.
- Debemos señalar que como ex integrantes de las FARC-EP hemos venido aportando verdad en cumplimiento de lo acordado, pero también consideramos importante y necesario que la línea de investigación en relación con la Fuerza Pública, sus vínculos con grupos paramilitares y otros actores armados, brinde prontos resultados, debido a que solo se logrará comprender la magnitud de este conflicto cuando todas las partes involucradas reconozcan lo que les corresponde.
- Existe la urgente necesidad de luchar contra la estigmatización, eliminando calificativos, menguando el nivel de exposición y la adopción de formas de comunicación propias de una jurisdicción diseñada para transitar de la guerra a la paz, que brinde plenas garantías y que promueva la reconstrucción del tejido social.
- Vemos con mucha preocupación la escalada que el conflicto ha tenido en los territorios, la cifra de asesinatos de firmantes supera los 390 y continúan las victimizaciones a la población, por tanto, es urgente atender de manera integral el tema de la seguridad de las comunidades y los firmantes de paz, más aún, de aquellos que actualmente comparecemos ante el Sistema Integral para la Paz y que hemos estado comprometidos con este proceso, por lo que deben garantizarse la adopción y correcta implementación de medidas de protección acordes a las particularidades de los territorios.
Convencidos de seguir en la ruta correcta para construir una Colombia con justicia social y paz total, mantenemos nuestro compromiso con la vida, las víctimas y la verdad.
Firmantes de paz comparecientes en el macrocaso 02.